PREÁMBULO
Dentro de la presente obra, no
se pretende que la misma sea tomada como una recopilación histórica de los
hechos aquí narrados, ya que lo que se busca es que sea tomada en su contexto
literario, como una novela, en la cual algunos de los nombres originales de los
personajes de la misma han sido cambiados, para proteger las identidades de
algunas personas. O para evitar malas interpretaciones. Siendo pura
coincidencia si se encuentran nombres de los personajes reales que coincidan
con los personajes de la novela. Las fechas de los sucesos aquí narrados en algunos casos no concuerdan
con las fechas reales de los hechos, ya que lo que se intenta dar a conocer, no
son las circunstancias exactas de los casos, sino el hecho mismo; narrando con
toda crudeza, cuáles fueron las posibles causas de cada crimen, sin llegar a
afirmar en ningún momento que esas fueran las causas reales de los mismos, o
que exactamente de esa manera se dieron los hechos.
La
novela básicamente se refiere a una serie de casos reales, especialmente de
asesinatos, investigados entre los años de 1997 y 1998.
Estando basada en algunos capítulos, por la narración hecha por el señor JUAN
COLCHÍN.
El autor.
PALESTINA
SANGRIENTO:
C A P
I T U L O I
EL
CONFLICTO ARMADO:
¡Auxilio!, ¡socorro! ¡Ayúdenme!, ¡No
encuentro a mi padre! ¡Dónde estás mamá! ¡Mis hijos no se los lleven! ¡Corran,
corran, huyan, escóndanse! ¡No, mi rancho no me lo quemen, es todo lo que
tengo! ¡No se lleven a mi esposo! Eran
los gritos que se escuchaban en las aldeas campesinas, que habían sido atacadas
por la noche o en horas de la madrugada por el ejército, eran niños, mujeres,
ancianos, suplicando ayuda para encontrar a sus parientes en medio de la
masacre. Cuerpos mutilados, sangre por todos lados, todo era confusión y caos,
gritos de dolor, llanto y desesperación. Así iniciaba el calvario de la aldea o
el caserío que había sido tomado por los cuerpos castrenses. Eran las campañas
militares.
En
el año de l982 en el gobierno de facto del general EFRAIN RIOS MONT, recrudeció
la violencia en todo el país. la UNION REVOLUCIONARIA NACIONAL GUATEMALTECA,
combatía en una serie de frentes que fue abriendo a lo largo de todo el país,
la URNG, también abrió frentes de batalla en el departamento del PETEN,
resultado de ello, fue entre otros, la masacre conocida como DE LAS DOS ERRES,
también la masacre de los JOSEFINOS, y la de la aldea de SAN SIRISAY EN IZABAL, dirigida dentro de una política de estado bautizada con el
nombre de TIERRA ARRAZADA, como se denominaba en esa época, una de las tantas
campañas del ejército, en su afán de tener el control de los territorios en los
cuales se movía la guerrilla, cientos, miles de familias desaparecieron en esa
época, la mayoría ultimados por las fuerzas castrenses y otro porcentaje por la
guerrilla. Otra de las políticas del gobierno de esos días fue el programa de
FUSILES Y FRIJOLES, por medio del cual los militares entregaban un quintal de
fríjol, y uno de arroz, a cambio de que nosotros los campesinos, recibiéramos
un fusil e hiciéramos patrullaje en nuestras comunidades, de esa manera
mantenernos alerta por la llegada de la guerrilla, para que fuéramos el primer
frente de combate contra los insurgentes, que detuviéramos o denunciáramos a
los miembros de la comunidad que tenían contacto con la guerrilla. Estos planes
castrenses fueron los precursores de lo que más adelante fueron LAS PATRULLAS
DE AUTODEFENSA CIVIL.
Entre
los años de l980 a l983 sufrimos el mayor recrudecimiento de la lucha por los
dos bandos, en los que nosotros los campesinos quedábamos en medio del fuego
cruzado. Por esos días, si nos visitaba el ejército, entonces nosotros debíamos
proporcionar comida de la nuestra, y si días más tarde venía la guerrilla
debíamos tener comida para ellos también, ya que de no tenerla, nos acusaban de
colaboradores del ejército y podíamos encontrar la muerte, igual situación se
daba con el ejército, que de no tener comida para ellos y obedecer sus órdenes,
nos acusaban de colaboradores de la guerrilla, encontrando fácilmente la
muerte, de allí se originaron tantos cementerios clandestinos que hasta ahora
se están descubriendo. En todo el país quedaron cientos de fosas, con miles de
cadáveres, de todos los desaparecidos que provocó uno y otro bando. Fue una época muy difícil, en donde los
alimentos para nuestra propia familia escaseaban, porque debíamos compartiros
con los dos grupos. De esta forma fue
como más adelante, se formaron LAS PATRULLAS DE AUTODEFENSA CIVIL, éstas se
formaron con distintos objetivos. El
primer objetivo fue: En la comunidad se creaba el divisionismo dentro del
grupo, porque los que eran llamados a integrar las patrullas de autodefensa
civil, en algunos casos, comenzaron a usar esa cuota de poder para su propio
beneficio, y cometer abusos de poder dentro de su comunidad, lo que hacía que
el resto ya no los viera con buenos ojos, ya no confiaran en ellos. El segundo
objetivo fue: Porque dentro de otras funciones de los patrulleros era la de
“vigilar”, qué miembros de la comunidad trabajaban o colaboraban con la
guerrilla, lo que trajo como consecuencia, que muchas personas fueran acusadas
injustamente de pertenecer a esa agrupación insurgente, como en esos días para
la visión castrense era el peor delito que se podía cometer, así fue como muchas
personas, sobre todo padres de familia, fueron desaparecidos y sus cadáveres
nunca encontrados, hasta en el año de mil novecientos noventa y seis, a la
fecha actual dos mil cuatro, a través de la fundación de amigos y desaparecidos
de Guatemala, (FANDEGUA) con la colaboración del grupo de Antropología Forense
de Guatemala, se han llevado a cabo una serie de exhumaciones de cementerios
clandestinos, en donde poco a poco, se han ido encontrando los cadáveres de
todos aquellos cientos de desaparecidos de aquella época, que hoy suman miles
de osamentas recuperadas, la mayoría de estas en lo que fueron los
destacamentos militares de aquella época, dejando una gran cantidad, que
haciende en este país a miles de mujeres viudas y miles de huérfanos, además de
miles de campesinos que decidieron abandonar sus tierras, ante el exterminio de
aldeas completas, esto trajo más divisionismo dentro de las comunidades porque
todos desconfiaban unos de otros, todos se cuidaban de lo que hablaban o de lo
que escuchaban; ya no se pudieron compartir tantas cosas que compartíamos
en principio.
Nosotros
como muchos otros hombres en todas las comunidades del país, tuvimos que
prestar servicio militar, formamos parte de las patrullas de autodefensa civil,
pero mi hermano y yo nunca estuvimos del todo convencidos que esto fuera lo
mejor para nosotros, o para la comunidad, por lo que siempre tratamos de
mantener los lazos de amistad con nuestros hermanos campesinos de la comunidad,
nunca nos préstamos a denunciar a nadie, por ningún hecho, en la base militar o
destacamento militar, razón por la cual algunos militares no nos veían con
buenos ojos, por el otro lado, siempre
logramos que mucha gente confiara en nosotros y tratamos de seguir ayudando a
todo el que podíamos.
Pero
como dije antes, ese fue el principio de una larga cadena de sucesos que nos
llevaría a un FINAL SANGRIENTO.